#cuentoBD A la vuelta de una noche de celebración sintió un pequeño terremoto que movió el suelo y hacía que se tambaleara, eso le había provocado ese aspecto de borracho, porque

#cuentoBD Lo compartían todo menos el comedero, bueno todo tampoco, que ser hermanos no obligaba a hacerlo. Por eso le chivó al lobo donde tenían la casa de paja y la de leña,

#cuentoBD   No tenía telarañas en el frigo porque ya se las había comido, dejaba latas vacías dentro para alimentarse de recuerdos y se reía cuando decían que la «cosa» iba a

#cuentoBD   Era un «manitas» creativo y le encantaba su trastero porque era como su vida, tenía de todo y bien controlado, un desorden bien ordenado. El día que se lo ordenaron

#cuentoBD   En el parque vio caer las magnolias mientras otras nacían en el árbol y recordó: «para volver a nacer hay que dejarse morir». Fue al puente para tirarse con la

#cuentoBD   Cuando la piedra suda emana vida, le dijo; ¡Pues hace un frío de cojones!,le contestó. Piensa y repítete:«el Mundo no gira a mi alrededor». Lo pensaré. Ahí quedó la

#cuentoBD  Le llamaban «El Mirlo» porque era desconfiado y se adaptaba a cualquier habitat y situación, ideal para el trapicheo en escalas sociales variadas. Nunca quiso ser jefe

#cuentoBD Como protesta por el modelo consumista de esta sociedad capitalista, quemaba los contenedores y luego depositaba la basura. Cuando lo detuvieron le pasaron la factura,

#cuentoBD   Siempre fue un gallito, le pregunté, ¡Sí!¿Y qué?¡A que te pico!, contestó mientras atrapaba un gusano y lo engullía. Le duró poco la chulería porque nada mas darme la

#cuentoBD   Como no había aprendido a nadar le daba miedo tirarse a la piscina. Lo pensó mucho, valoró pro y contra, analizó su pasado y el futuro. Se tiró con los ojos cerrados