#cuentoBD

Milagros decían que hacía. Milagros le pedían. Impotente, lo único que pudo hacer fue ayudar, curar y acompañar a quien lo necesitaba, nada más.

Al calor de la lumbre se lamentaban de ser sólo un adorno y de haber dejado de escuchar el sonido de las olas en su interior.

Se plantó en jarra y le dijo: ¡Nunca más lo vuelvas a hacer!…

Qué pena no haberme plantado antes -pensó.

La Belleza estuvo enjaulada esperando a alguien que la desenjaulara. Se marchitó en la espera sin darse cuenta que la puerta nunca estuvo cerrada.

El Recolector de Pensamientos los repartía todas las mañanas, a unos les gustaba el que le tocaba y a otros no.

Llevaba tanto tiempo con la mente en blanco que no veía el arco iris que le saludaba todos los días.

Buen día tengan ustedes

¡Cómeme! – le dijo. Y se lo comió, este no le supo tan soso como el anterior.

Buen día tengan ustedes.

Las costillas de Adán seguían vivas después del 8 de marzo pero ya nadie las felicitaba.

El apagador de fuegos se incendió al verla y se quemaron juntos

Buen día tengan ustedes

“Después de una larga y borrosa madrugada, se despertó destrozada y sin saber por qué”

Buen día tengan ustedes